Como ya sabrás, todos los tratamientos tienen sus pasos para la aplicación. En este caso te diremos los tres pasos clave para aplicarte la mascarilla, teniendo en cuenta el proceso completo de la aplicación desde que te preparas para aplicártela hasta que te la retiras. 

El primer paso es el más importante, pues se trata de la limpieza del rostro. Recuerda que para que tu mascarilla tenga el mejor efecto en tu piel es necesario que realices previamente una limpieza exhaustiva, pues así tu piel podrá tomar completamente los componentes de la mascarilla. También es importante seguir el método de aplicación, usar el agua en la temperatura que lo indique la mascarilla y secar tu piel a toques, suave y delicadamente. 

El segundo paso tiene que ver con la aplicación de la mascarilla. Como sabes, el contorno de los ojos es el área más delicada del rostro, por lo cual te recomendamos que evites depositar el producto sobre esta y sobre el contorno de la boca para evitar molestias en los labios, ya que la piel es más sensible. Aplica la mascarilla con tus manos totalmente limpias o ayúdate con una brocha plana y suave, especial para mascarillas, y recuerda dejarla actuar durante cinco minutos. 

El tercer paso es igual de importante que el primero, pues tampoco queremos que tu piel se obstruya con el producto, así que al retirarlo debes ser igual de cuidadosa, procurando que todos los extremos de tu rostro queden limpios de la mascarilla. Enjuaga con agua a la temperatura que se recomiende y seca nuevamente tu piel con una toalla. Recuerda aplicar un tónico o crema facial de noche para hidratar tu piel, pues debes tener en cuenta que durante este tiempo las células de la piel se regeneran y es un proceso importante para que tu piel permanezca joven.